Hola entrenador.


No creo que me recuerdes. Mi nombre es José Luis Zafra, fui tu discípulo en 1975, en el Colegio Claret, tenía 10 años.

Hace tiempo que quería escribirte, sobre todo después de aquellas acusaciones que tanto nos indignaron, no sólo a ti, sino también a muchos incluso que no recuerdas. Hoy sólo puedo desear que hayas pasado página y puedas seguir disfrutando de lo que sabes significas para muchos, yo entre ellos.


Quiero mandarte un abrazo, el del niño que, hace 44 años, no se atrevió a darte. Espero que lo aceptes, va con el cariño, respeto y admiración de alguien para el que, desde niño, eres un referente en su vida.


Y Feliz Navidad, en compañía de tus seres queridos.

José Luis Zafra